Durante los años 2011 y 2012, nuestro Papa Emérito Benedicto XVI dedicó un número importante de las catequesis de los miércoles a un tema muy especial para los cristianos: la oración. Durante estas catequesis sobre la oración hace un recorrido maravilloso desde las Sagradas Escrituras hasta las experiencias de vida mas cotidianas como las vacaciones y la lectura, siguiendo este itinerario:
- ¿Que es la oración?
- Figuras del Antiguo Testamento, ejemplos de oración
- Los Salmos, libro de oración
- La Biblia
- La creación
- La Meditación
- El arte y la oración
- Orar con los salmos
- La oración de Jesús
- La oración de María
A partir de hoy estaremos publicando una entrada semanal en el blog con grupos de dos o tres sesiones de catequesis de esta Escuela de Oración, indicaremos el tema de cada una y facilitaremos el enlace donde podrán disfrutar del texto completo. Por supuesto pueden leerlas todas de corrido o simplemente ir apreciando una por una y meditando qué significa la oración en su vida y cómo es su diálogo con el Señor.
Arrancamos con las dos primeras sesiones que se refieren a lo que significa la oración y su importancia para el cristiano:
AUDIENCIA GENERAL, Plaza de San Pedro, Miércoles 4 de mayo de 2011
Quiero elegir un un tema que nos interesa mucho a todos: es el tema de la oración, de modo específico de la cristiana, es decir, la oración que Jesús nos enseñó y que la Iglesia sigue enseñándonos. De hecho, es en Jesús en quien el hombre se hace capaz de unirse a Dios con la profundidad y la intimidad de la relación de paternidad y de filiación. Por eso, juntamente con los primeros discípulos, nos dirigimos con humilde confianza al Maestro y le pedimos: «Señor, enséñanos a orar» (Lc 11, 1).
AUDIENCIA GENERAL, Plaza de San Pedro, Miércoles 11de mayo de 2011
En la experiencia de la oración la criatura humana expresa toda la conciencia de sí misma, todo lo que logra captar de su existencia y, a la vez, se dirige toda ella al Ser frente al cual está; orienta su alma a aquel Misterio del que espera la realización de sus deseos más profundos y la ayuda para superar la indigencia de su propia vida. En este mirar a Otro, en este dirigirse «más allá» está la esencia de la oración, como experiencia de una realidad que supera lo sensible y lo contingente.
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